Al subir al avión notamos que hay un pequeño
retraso. Escucho a una de las azafatas decir que falta por embarcar un
pasajero. A los cinco minutos entra un tipo alto y gordo vestido de negro, con
una mochila al hombro. No le doy mucha más importancia.
El avión despega. Jara y yo compartimos auriculares
y vamos escuchando la misma música. Cuando suena la canción There is a lightthat never goes out de The Smiths empiezo a pensar en accidentes. Las vistas a
través de la ventana siguen siendo bonitas.
Siguiente
→
←
Anterior
No hay comentarios:
Publicar un comentario